Archivo por meses: noviembre 2004

Poesía: José Watanabe

José Watanabe es uno de esos poetas tranquilos que publica cada cierto tiempo unos pequeños y entrañables poemarios, ajenos quizás a tendencias y usos dictados por la moda, pero fieles a su propio ideario, el de la palabra precisa. El día de hoy La República presenta un artículo redondeado con una pequeña entrevista y algunos de los nuevos poemas de su próximo libro. Más poemas aquí. A continuación un par de las preguntas de dicha entrevista y uno de los poemas.

–¿Crees en la inspiración?
–Yo sí creo en ese estado especial en el que uno hasta siente que recibe palabras, que te dictan, frases que vienen volando y se quedan ahí, solas. Pero eso es la primera versión, luego viene el proceso de corregir. Es lento, paciente, pero a mí me da más felicidad que escribir la primera versión.

–¿Es el turno del poeta?
–Exacto. Es allí donde te das cuenta de que estás jugando con un material tan maleable como es el lenguaje, tú tienes que forzar, fijarlo. Allí está la mano del poeta, pero no debe eliminar los impulsos y las cargas afectivas que llegaron con la inspiración.

La piedra alada

El pelícano, herido, se alejó del mar
y vino a morir
sobre esta breve piedra del desierto.
Buscó,
durante algunos días, una dignidad
para su postura final:
acabó como el puro movimiento congelado
de una danza.
Su carne todavía agónica
empezó a ser devorada por prolijas alimañas, y sus huesos
blancos y leves
resbalaron y se dispersaron en la arena.
Extrañamente
una de sus alas persistió indemne, sus gelatinosos tendones
se secaron
y se adhirieron
a la piedra
como si fuera un cuerpo.
Durante varios días
el viento marino
batió inútilmente el ala, batió sin entender
que podemos imaginar un ave, la más bella,
pero no hacerla volar.

500 Greatest Songs and Albums

La Rolling Stone publica la relación de las 500 Greatest Songs of all time y los 500 Greatest Albums of all time. Cabe indicar que la lista de los albumes fue publicada en noviembre del 2003 y la de las canciones en noviembre 2004. Aquí un nota acerca del proceso de selección de las canciones.

La de albumes está bastante buena, el criterio es amplio, no es sólo rock, incluye jazz y otros géneros como pop, blues, country. Por ejemplo, hablando de jazz, en el puesto 12 está esa obra maestra que es el Kind of Blue de Miles Davis, en el 47 A love Supreme de John Coltrane y en el 100 In the wee small hours de Frank Sinatra. Pero siempre habrá cosas con las que no se está de acuerdo, como que en el puesto 43 esté The Dark Side of the Moon de Pink Floyd, que debería estar entre los 10 primeros, o que haya 4 álbumes de The Beatles en los primeros 10 … en fín.

En cuanto a la de canciones, no esta mal, aunque demasiado soul a mi parecer. Y los muchachos de hoy encontrarán poco de su gusto, pero claro .. no es una lista de los noventas o del 2K.

Un blog abierto

El 30 de agosto, Miguel de Yo no soy la resurreción decidió dejar de postear en su blog por tiempo indefinido, pero a la vez decidió abrirlo al público, así cualquiera que lo deseara podría postear en dicho blog. Al principio sólo posteaba Aníbal, pero poco a poco la cosa se va propalando y ya hay varios que postean. Interesante experimento que provoca imitar.

Ah este pequeño post sobre Artaud de Spinetta me encantó.

Bob Dylan – Chronicles Vol. I

Más que su música me gustan sus letras, que más que letras son poesías. Llegué a Bob Dylan hace muchos años, si no hubiera sido por Graciela (Zeppy) nunca quizás me hubiera interesado en él. Por ella las leí, por ella las traduje, por ella conseguí tantos de esos discos casi aburridones de escuchar si no sabes qué es lo que te cuentan. Hace un tiempo posteaba sobre la edición de una obra crítica sobre sus letras: Dylan´s Visions of Sin, y recientemente lo he citado por ahí casi sólo de puro gusto. Hoy leo en Caretas: Dylan lo que Dylan, un artículo sobre la edición del primer tomo de su autobiografía: Chronicles Vol. I que referencia a una entrevista dada por Dylan a David Gates para Newsweek y que tiene versión castellana en Newsweek en español. Ahora sólo queda esperar a que se traduzcan ambos libros … ¿Será mucho pedir?.

Todo empieza con un escenario familiar: Nueva York. Un Dylan menor de edad da un portazo al sedan Impala del 57’ que lo llevó a través de tres estados, 24 horas de viaje, hace adiós con la mano y se queda parado solo en la nieve. Era el invierno del 61 pero en Greenwich Village el mundo ardía. «Al fin estaba ahí, —escribe— en Nueva York, una ciudad tan intrincada de entender que yo ni siquiera pensaba intentarlo. Estaba ahí para encontrar cantantes, aquellos a los que había escuchado en los discos —Dave Van Ronk, Peggy Seeger, Ed McCurdy, Brownie McGhee y Sonny Ferry, Josh White, The New Lost City, Reverend Gary Davis y otros tantos— pero sobre todo, quería encontrar a Woody Guthrie. Nueva York, la ciudad que moldearía mi destino. La Gomorra moderna. Estaba al inicio de todo pero no era, en sentido alguno, un neófito.» (De Caretas).

Desde su perspectiva, la fama no sólo ha distorsionado su vida, sino también su arte y al responder a la situación con un nuevo estilo musical que pretende frustrar expectativas, él mismo queda perplejo. «No sabía lo que hacía. Todo se basaba en la reputación, la cual por supuesto reditúa cierta cantidad, pero nos quita el control. Y hasta que recuperamos el control, nunca se sabe si estamos haciendo lo correcto. Al menos así fue en mi caso. De modo que, durante algún tiempo, me dejé seducir por la fama de que hablamos. Pero aquello fue como un globo lleno de aire y no vi que se me iba de las manos hasta que lo perdí». ¿Y cuánto tiempo duró esta situación? «Hablando artísticamente, debió comenzar alrededor de la época de Woodstock —no en lo personal, sino públicamente— y duró hasta el lanzamiento de ‘Time Out of Mind». Hago un esfuerzo por mantener la boca cerrada. Está hablando de los 25 años que condujeron a «Blood on the Tracks», «Slow Train Coming», «Shot of Love», «Infidels» y sus sublimes tomas falsas y… no. Me niego a discutir con el hombre que posee lo que realmente tiene valor. Tomo un sorbo de mi taza. Es de porcelana. Como yo no soy Bob Dylan, no tengo problemas para ir al restaurante al final del pasillo, aunque el café sigue corriendo por cortesía de la casa. (De Newsweek)

El punk y el artista

Nuestro paisano Luis desde su blog El Autobus nos invita a leerlo en Esculpiendo Milagros … cosas de la globalización y la colaboración. El artículo es bueno y ha generado un entretenido debate, como casi siempre sucede en estos casos. Y es que el punk y la estética del arte llevada hasta sus últimas consecuencias seguirán siendo temas interesantes, aunque no para todos, por mucho tiempo.

¿No había dicho Johnny Rotten que quería destruir a los transeúntes? En este momento era un acto significativo, un intento colectivo de probar que la representación física de una representación estética podía producir realidad, o al menos sangre verdadera.» (Extraído de Rastros de Carmín de Greil Marcus)

Rock Peruano: Mitos del ocaso de los 70´s

Definitivamente no visito con la frecuencia necesaria los blogs que suelen colgar posts de mi interés. El 21 de Octubre en Esculpiendo Milagros se publicó una extensa nota sobre rock peruano de los 60´s y 70´s preparada por Fidel Gutierrez y aunque quizás no haya sido originada por, mentiene una temática temporal con un post anterior de Humberto Luna aparecido también en el mismo blog y que oportunamente comenté. Más específicamente este nuevo artículo analiza los motivos de que aquella primera oleada de grupos muriera o se desvaneciera en iniciativas no integradas al entorno.

Es muy simplista atribuir la debacle de la primera generación de bandas del rock peruano a la dictadura de Juan Velasco Alvarado. Por lo general utilizan dicho argumento los miembros de los propios grupos de esa época para justificar su súbito desinterés y falta de visión frente a una escena que, gracias a su comportamiento poco decidido, sucumbió ante el primer embate serio que sufrió. Nadie habla del tema de fondo: la falta de identificación entre músicos de rock y su audiencia. Hablo de identificación verdadera, de esa comunión intelectual y de valores que caracterizó a la cultura rock en esos, sus años formativos.


Y así empieza a desgranar los motivos de esa muerte, aportando además algún testimonio poco conocido, por lo menos para mí, como una entrevista a Frágil: Entrevistados por el suplemento Visto y Bueno del diario El Comercio (30 de julio de 1999) con motivo del retorno de su formación original, repitieron en determinado momento la consabida afirmación de que la dictadura de Velasco estancó al rock nacional. El reportero retrucó que en Argentina el género sobrevivió pese a regímenes dictatoriales verdaderamente sangrientos. “Es que ellos tienen una raza más homogénea, mientas que los limeños éramos invadidos por los pueblos de los alrededores”, dijo el tecladista, a lo que el guitarrista añadió: “La indiada, compadre”. Nuevamente el tecladista: “Como sea. Fue un choque total, y desapareció la clase media”. Indudablemente los logros musicales de un grupo no son evaluados por su ideología o por los defectos personales de cada uno de sus miembros, pero sí es un dato a tener en cuenta para explicarnos muchas cosas.


Adicionalmente, al final de dicho post se incluye una posdata con mayor información sobre algunos de los datos incluidos en el post mencionado de Humberto Luna. Si no lo leyeron es un buen momento para hacerlo y tener una sobredosis de rock peruano. Ah, por si acaso, el post de Fidel es el segundo en el link permanente proporcionado.

Del papel de los blogs

Este post de Jorge Gobbi en Blog de Viajes me ha provocado extrapolar algunas de las preguntas que se plantea hacia nuestro ámbito:

¿Cuál puede ser el papel de los blogs dentro de la diversa realidad peruana?

¿Pueden los blogs revivir el debate de ideas?

¿Son los blogs medios de difusión y circulación de información lo sificientemente desarrollados en nuestro país?

¿Vale la pena dedicarle tanto esfuerzo a los blogs desde una perspectiva mas profesional en un ambiente básicamente adolescente?

La respuesta como dijo Bob Dylan, debe estar Blowing in the wind, habrá que esperar que el viento sople de este lado nomás.

Tendencias blogosféricas

En dos posts seguidos Mariano de Denken Uber hace un repaso de algunas notas, o mas bien diría, tendencias sobre weblogs. En el primer post Apostando al ecosistema, desde el punto de vista de la blogósfera como base para negocios y en el segundo Apostando desde el ecosistema, toma la perspectiva del uso de la tecnología de los blogs para causas digamos más sociales, de apoyo a las comunidades (no comunidades de bloggers, ojo) o a las instituciones que trabajan para ellas.

Ambas vertientes son muy interesantes, la primera de hecho para la gente que esta en business, los marketeros y demás relacionados. La segunda, para aquellos que están en política, trabajo social y similares. En los comentarios, que no son muchos, también hay datos interesantes. Y nunca me cansaré de decirlo, qué diferencia de actitud con la gente de la blogósfera peruana, mientras en otras partes se hace desarrollo y se plasman proyectos, acá el uso que se les dá a las mismas herramientas es banal e intrascendente: chisme y raje, chongo y vacilón, full crítica y cero aporte. Interesados en cambiar por favor dejen comentarios. (Esperaré sentado).

Trevor Horn

El 11 de Noviembre se realizó en Londres el concierto for the Prince´s Trust, celebrando los 25 años de actividades musicales de Trevor Horn. Si el nombre no les suena, quizás sí Pet Shop Boys, Simple Minds, Frankie goes to Hollywood o Belle and Sebastian, artistas que en algún momento fueron producidos por Trevor. O Buggles su grupo de los 80´s. O como en mi caso, la referencia más directa: Yes, grupo al cual se integró para un único lp: Drama.

Los Buggles saltaron a la fama con la canción Video Killed the Radio Star, cuyo video fue usado por la MTV para inaugurar sus transmisiones. Despúes de más de 20 años de haber oído dicha canción, me entero a través de una entrevista en The Guardian, que Trevor Horn se inspiró en un cuento de J. G. Ballard (uno de mis escritores favoritos) para componerla. Sorpresas que uno encuentra. El resto de la entrevista interesante también.

Horn is fascinated by technology partly for the dehumanising impact it has on society. «Me and my friends were obsessed with a song called Warm Leatherette by the Normal, which is based on [JG Ballard’s novel] Crash. The opening scene in the book features a head-on car crash where the guy is looking at a woman whose husband is between them, dead on the bonnet of the car. They are trapped in the smashed-up cars, facing each other, and that’s the most incredible image. Ballard was a big inspiration at the time – Video Killed the Radio Star came from a Ballard story called Sound Sweep in which a boy goes around old buildings with a vacuum cleaner that sucks up sound. I had a feeling that we were reflecting an age in the same way that he was.»

William Gibson – Agrippa

No es un nuevo libro de Gibson, se trata de un poema del año 1992 escrito en memoria de su padre, que tiene una historia bastante particular. Según Anton Rauben Weiss se editó en un diskette de edición limitada que se autoborraba a medida que se iba leyendo. Y la edición en papel fue hecha con tinta que de desvanecía al ser expuesta mucho tiempo a la luz. Sin embargo el propio William Gibson no asegura que esto sea totalmente cierto.

Todo esto viene al caso debido a que recién descubro la traducción al castellano de dicho poema hecha por Saurio. Para los bilingues la versión original. Ah, obviamente no es Ciencia Ficción. Y por supuesto, recién descubro también que en el blog Rizomas se ha posteado casi exactamente lo mismo que estoy publicando ahora … si casi da verguenza hacer click.