La ley de comida chatarra: ¿el fin de la libertad?

Sanguche chatarra

Ya es costumbre que dentro y fuera del Perú se hable mucho de la gastronomía peruana. En las últimos días el tema de la comida ha estado, otra vez, en boca de casi todo el mundo, pero no por las bondades de los platos o ingredientes nacionales, si no por la reciente promulgación por parte del Presidente Ollanta Humala de la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable para Niños, Niñas y Adolescentes.

La ley, cuyo texto fue publicado el viernes 17 de mayo, declara tener por objeto «la promoción y protección efectiva del derecho a la salud pública, al crecimiento y desarrollo adecuado de las personas, a través de las acciones de educación, el fortalecimiento y fomento de la actividad física, la implementación de kioscos y comedores saludables en las instituciones de educación básica regular y la supervisión de la publicidad, la información y otras prácticas relacionadas con los alimentos y bebidas no alcohólicas dirigidas a los niños, niñas y adolescentes».

Luego que el proyecto de ley se aprobara en el Congreso el 2 de mayo, el congresista Luis Galarreta declaró que la ley tenía una «visión absolutamente intervencionista que creo que sí pone en riesgo los medios de comunicación y a la propia finanza de los medios”. Mientras que el exministro de Comercio Exterior y Turismo, Alfredo Ferrero, manifestó que debido a las imprecisiones de la ley, ésta «podría afectar la transmisión del Mundial Brasil 2014.»

La Sociedad Nacional de Industrias (SNI) ha pedido su derogación pues al prohibir la venta de alimentos envasados en los colegios se está fomentando el consumo de productos informales en detrimento de la salud de los escolares, y además los colegios no están preparados para asumir la tarea de alimentar a los niños.

Por otra parte Fernando Leanes, representante de la Organización Panamericana de Salud (OPS) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha respaldado la dación de esta ley, y declaró que «(se trata de evitar que) enfermedades silenciosas como son la diabetes o la hipertensión arterial generen que los niños en el futuro, cuando tengan 40 o 50 años, tengan problemas.»

snacks chatarra

En las redes sociales las opiniones están repartidas por igual y el debate se sazona con fotos de suculentos sanguches y demás comida comunmente etiquetada como chatarra.

En Twitter Miguel Mellado @miguelm1504 comentaba algo en lo que varios parecen estar de acuerdo:

En Facebook la escritora Sonia Luz Carrillo compartió su sentir mientras veía una entrevista televisiva sobre el tema:

La publicidad de los productos menos saludables y hasta francamente dañinos a la salud según los especialistas – nutricionistas debidamente acreditados, por ejemplo- es uno de los principales ‘alimentos’ de las empresas de comunicación, especialmente la televisión. Eso explica la campaña en contra de la Ley y cualquier otro dispositivo que coloque la necesidad de conocimiento conveniente para que el público pueda optar por una alimentación saludable.

La polémica se incrementó cuando el Cardenal y Arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, declaró que hace tiempo que no consume comida chatarra y que cree que mucha de ella hace daño, pero a la vez esta en contra que se le imponga a las personas qué pueden o no pueden comer.

El publicista Robby Ralston, en un artículo bastante comentado y compartido en las redes sociales escribía que a su parecer la ley está débilmente concebida, lo que «deja tantas áreas grises que invita a pensar mal» añadiendo que «conduce inevitablemente al camino de la censura publicitaria y la corrupción». Mencionando finalmente que «lo que verdaderamente me molesta es que limiten mi libertad de hacer publicidad y sobre todo la libertad de los peruanos de ver y disfrutar la publicidad.»

La periodista Isabel Guerra comentaba en Facebook otro de los argumentos esgrimido por Ralston:

El Tribunal Constitucional ha despenalizado las relaciones sexuales presuntamente consentidas con menores de entre 14 y 17 años. Ahora tenemos una ley que supuestamente prohibirá que a esos mismos menores se les venda «comida chatarra». Es decir, un adulto se puede llevar a la cama a una nena de 14 años, pero no le puede vender un pan con hot dog… :S #yodigonomás :S

La discusión descendió de nivel cuando una periodista tuiteó una foto de las hijas del Presidente Humala y comentó que una de las niñas parecía estar subida de peso, lo que le costó una andanada de críticas de todo calibre.

Dado que el Ministerio de Salud tiene 60 días calendarios para reglamentar la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable, se espera que el debate, y la presión de los diversos grupos de interés, continúe.

niños

La primera imagen es de Felipe Troy en Flickr y se usa bajo una licencia CC Attribution-NonCommercial-ShareAlike 2.0 Generic (CC BY-NC-SA 2.0).
La segunda imagen es de este artículo de The Clinic.
La tercera imagen es de este post del blog Nada nos Libra de Escorpio.

7 comentarios en “La ley de comida chatarra: ¿el fin de la libertad?

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  4. Moises P. Bush

    El proyecto se centra en el fomento de la alimentación saludable en el supermercado, es decir, en el momento en que los consumidores realizan la compra y por lo tanto tienen la capacidad de elegir la composición de su cesta de la compra.

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  5. Francisco

    Las autoridades públicas tienen la obligación de velar por la salud del conjunto de la población, en mayor medida de los menores de edad. Otra cosa son los intereses de quienes
    viven directamente o indirectamente (publicistas incluidos), de la comida chatarra, que evidentemente estarán en contra de la medida.Aunque ellos no la consuman en su vida diaria…

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