Archivo de la etiqueta: entrevista

Michel Serres

En el diario La Nación de Argentina publican una entrevista a Michel Serres, filósofo francés que habla de cosas muy interesantes. Vale la pena leerla completa.

-¿Cuál es el problema con los filósofos que no conocen el universo científico?
-En la historia de la filosofía, casi todos los grandes filósofos -de Platón a Leibniz, pasando por Hegel y Descartes- fueron también científicos. ¿Qué puede decir un filósofo sobre el mundo si no conoce nada de la química, productora de la mayoría de los objetos que tocamos, ni de la biología y sus remedios, que hicieron progresar la esperanza de vida 50 años en un siglo, ni de las nuevas tecnologías, que transformaron completamente el espacio y el tiempo?

La globalización, según usted, es tan vieja como el hombre…
-Cuando nuestros ancestros salieron de Africa para diseminarse por el planeta, firmaron el primer acto de globalización. Todos somos descendientes de ese puñado de africanos. Tenemos el mismo ADN. El hombre es la especie mundializada por excelencia. Y ese movimiento prosiguió en todos los terrenos de la vida cotidiana, comenzando por la agricultura. Un día, simultáneamente, un genio en México supo transformar el teosincle de Chalco en maíz y otro genio, en Medio Oriente, el búfalo en buey. Gracias a esos dos gestos de domesticación, el mundo se volvió agrícola. Como usted ve, la mundialización data del neolítico.

-¿Y qué responde usted a quienes dicen que el acceso a las nuevas tecnologías aumenta la fractura social?
-Que es un absurdo. La fractura pedagógica y científica que existió siempre entre países ricos y pobres es muy superior a la que provocará la presencia de Internet en todos los rincones del globo. Como sucedió con la llegada de la imprenta, la Red es una herramienta formidable para poner el conocimiento y la cultura a disposición de todos. Se habla de esa fractura social, pero nadie la compara con la que existe ahora: esa fractura que precipita a los más pobres a la ignorancia total, mientras educa a los privilegiados en las universidades de Stanford y de Harvard. El costo de las nuevas tecnologías es irrisorio comparado con el de las tecnologías tradicionales. Con las nuevas tecnologías, bastaría muy poco dinero para inventar una enseñanza a distancia para los países pobres.

Pat Metheny y sus influencias

Imperdible, Pat Metheny habla en recientísima entrevista concedida al NYT sobre sus influencias: Sonny Rollins, Paul Bley, Miles Davis, Antonio Carlos Jobim, Jim Hall, Wes Montgomery entre otros. Y vaya que habla, son cuatro partes y esta excelente, si te gusta el jazz claro. También se habla de su nuevo disco The way up una suite de 68 minutos dividida en cuatro partes, trabajo con el cual está iniciando una nueva gira mundial.

My proposal was that we listen together to a few pieces of music (not his) that affected him strongly. It could be any music: the point wasn’t desert-island endorsements or a strict autobiography of influence; it was to talk about how music works. I had defined «a few» as three, or even one long piece, like a whole record. But Mr. Metheny took the challenge seriously.

«For me to say I’m going to build a case that describes something, under the guise of, you know, three songs – it actually shuts me down a little bit,» he said, seeming pained. «The whole idea of style and genre is actually something I’ve willfully resisted from the very early stage. So if I pick this and then I pick that, it creates these two pillars. But I think I know what you’re looking for, which has nothing to do with what I’m talking about.» He began to warm up. «I don’t think too much about stuff like this, and it’s been kind of a musical psychoanalysis. Most musicians are occasionally asked to put together their 10 favorite albums, but you’re looking for the undercurrents to it all.»

«You’ve got it perfectly,» I said.

Javier Marías – Entrevistas

Con motivo de la edición de su nuevo libro Baile y sueño, continuación de Tu rostro mañana, Javier Marías ha estado activo con los medios concediendo entrevistas a diestra y siniestra. El diario argentino Pagina/12 reproduce una entrevista ofrecida originalmente para El País de Madrid, España. Un par de preguntas para que se animen por el resto:

–Usted piensa que ahora la gente habla más, pero dice menos.
–Menos de interés. La cháchara no ha sido interesante nunca, pero ahora es más vacua que nunca. Es una tendencia que encuentro hasta en gente que te escribe cartas, que antes de ir al grano de lo que quieren decirte o consultar hacen una exposición larguísima.

–A lo mejor es que no tienen con quién hablar y usted les produce una confianza especial.
–Entiendo que un escritor pueda causar en los lectores una sensación de cercanía. Eso se produce. Los actores y los cantantes que viven de su imagen pueden ser muy adorados, pero un escritor en el fondo es alguien que está susurrando en el oído de un lector. Y si el susurro es lo bastante interesante y grato, el lector puede tener la sensación de conocer mucho a ese autor que está detrás de la novela. Pero creo que hay una especie de horror al silencio, que incomoda y va parejo, por ejemplo, con que España es un país muy poco musical y donde, sin embargo, todo el tiempo está sonando música. En los ascensores, en las peluquerías, en las tiendas…

También encuentro otra entrevista en El Mercurio de Santiago de Chile, que está mas centrada en la trama y personajes del nuevo libro, sin dejar de tocar otros temas por cierto:

-¿Y la literatura? ¿Qué estás leyendo ahora?
«Bueno, acabo de terminar la nueva novela de García Márquez, que me ha decepcionado enormemente, la verdad. No leo muchas novedades, en general. Estoy haciendo lecturas relacionadas con este libro, de documentación y también de asuntos que yo de una manera subterránea pongo en relación con esto. Estoy leyendo algunos libros de historia medieval, por ejemplo. Algunos clásicos también, intento leerlos más a menudo de lo que la gente suele hacerlo. Yo durante unos años estuve bastante al día de lo que publicaban mis contemporáneos, tanto en lengua española como en otras. Y desde hace algunos años he abandonado esa costumbre, porque la verdad es que resulta un poco cara, cara en cuanto al tiempo que uno dedica, y las remuneraciones son relativas. Y a medida que uno va teniendo años -yo tengo ahora cincuenta y tres- se va uno dando cuenta de que por ejemplo no ha leído todas las novelas de Dickens, a mí aún me quedan tres o cuatro de las extensas por leer; y me di cuenta de que yo sólo conozco parcialmente a Tito Livio, por ejemplo, y que me gustaría poderlo leer entero. Entonces uno se va haciendo más avaro de su tiempo en ese sentido, y va dedicándolo a aquellas cosas que cuando era más joven tenía para más adelante, porque de pronto uno se da cuenta de que el «más adelante» está llegando ya, ¿no?»

James Ellroy – Entrevista

Los aficionados a la novela negra, yo entre ellos, sabemos casi de sobra la accidentada biografía de James Ellroy, pero nunca está demás enterarse de otras cosas. En el marco de la Feria del Libro de Guadalajara, México, Enrique Planas lo entrevista en exclusiva para El Comercio, y parece que salió ileso.

A Ellroy le queda chica la sala donde se llevará a cabo esta entrevista. Con su metro 85 de estatura, la cabeza rapada, traje blanco y zapatillas, parece una especie de monje, pero su rostro de hombre de pocas pulgas contradice cualquier imagen beata. El escritor norteamericano más polémico y esperado en la Feria del Libro de Guadalajara visita la capital de Jalisco para presentar su último libro, «Destino: La Morgue», una recopilación de sus últimos artículos publicados en la revista «GQ». En ellos, con su particular estilo sintético y estilizado, el autor de «L.A. Confidential» (en el que se basó el premiado filme ‘Los Ángeles al desnudo’) deja en claro sus fijaciones: la política estadounidense, el boxeo, los perros, su errática juventud y, por cierto, la violencia, la corrupción y el crimen en la ciudad de Los Ángeles. Me cuidé de no preguntarle por su madre. Pero nadie me advirtió que no tocara temas de política…

«Destino: La Morgue» se inicia con un notable reportaje desde dentro de las convenciones demócratas y republicanas previas a las elecciones. ¿Es verdad que usted odia tanto a Clinton que por ello votó por Bush?
(Con fastidio) Eso no es exactamente la verdad. En el año 2000 sí vote por Bush. Voté por él porque soy conservador y quería que un republicano estuviera ahí para avanzar en esas políticas conservadoras.

¿Volvió a votar por Bush en las últimas elecciones?
(Molesto pero tranquilo) ¿Porqué entre los periodistas extranjeros siempre existe la tendencia de clasificarlo todo en izquierda o derecha cuando hablan con un escritor norteamericano? Para los periodistas, ser conservador es algo horrible. Si quieres saber por quién voté, te lo digo: mi nuevo voto es el no hablar de política.

No se moleste Sr. Ellroy. Me parece muy válida su opción.
Muchas gracias.

Otra historia de «Destino: La Morgue» narra su fascinación por las revistas de escándalo en Los Ángeles. Usted dice: «A los americanos les va el morbo y la adoración, compran por igual la Biblia y los tabloides».
Fueron dos elementos formativos en mi niñez. Hay ciertamente mucha violencia en ambas. Las revistas en su mayoría se interesaban en decirte quién era homosexual, quién se acostaba con un negro, quién tenía el pene más grande .

Finalmente, señor Ellroy, usted tiene una ganada fama de «ogro» con los periodistas, de entrevistado que se molesta rápidamente. ¿El hacer yoga lo ha ayudado en algo?
Eso no es verdad. No soy un ogro y ya no hago yoga. Traté de hacerlo por interés de mi esposa pero nunca me gustó. Soy un buen tipo. Lo que sucede es que luego de hacer 500 entrevistas, a veces puedes perder los estribos.

Solo una pregunta de su vida privada. ¿Es verdad que robaba lencería femenina? ¿Se excitaba con ello?
Sí, eso está en el libro. Tenía veinte años y también era un drogadicto. No me enorgullezco de ello.

Elfriede Jelinek reeditada

Entre las consecuencias de ser elegido premio Nóbel de literatura está la revalorización total de la obra del escritor, la traducción a casi todos los idiomas existentes y la reedición en los que ya existía una traducción previa. En el caso de la escritora austríaca recientemente elegida se han vendido en el mes de noviembre 220,000 ejemplares de sus obras sólo en los países de lengua alemana, y en castellano la editorial Destino ha iniciado la reedición total de sus obras empezando por Deseo, del 89. El diario argentino Página/12 en su suplemento cultural le publica una entrevista de la cual extraigo algo de la introducción y un par de preguntas.

Deseo es la historia del director de una fábrica de papel que, atemorizado por los efectos del sida, regresa al cuerpo de su esposa porque ya no se anima a frecuentar a las prostitutas, (la obra) provocó un notable escándalo, no faltará algún puritano argentino al que se le erice la piel por el lenguaje crudo y el elevado tono erótico con el que la austríaca desmonta los diferentes mecanismos de dominación en el seno de la pareja. Asqueada del sometimiento sexual de su marido, Gerti encontrará en un hombre más joven a un nuevo verdugo (ver aparte). Esta novela, en la que la autora despotrica contra la supuesta liberación sexual, ha sido comparada con Historia del ojo, de George Bataille, por la acidez de su prosa.

–Usted suele denunciar la persistencia del nazismo en la sociedad austríaca. ¿En qué aspectos se da esta permanencia?
–Lo que me interesa por sobre todas las cosas es la crítica del lenguaje, y además mi método de escritura tiene que ver fundamentalmente con la música del lenguaje; trabajo con la acústica, con el sonido de las palabras, y juego con eso; llevo los juegos de palabras hasta su límite más banal, al que no le rehúyo para nada. En este sentido es que también me interesa fundamentalmente la persistencia del fascismo en la mitología trivial, es decir, sus huellas reflejadas en series banales como las telecomedias familiares o en la literatura ligera. También por eso escribí Burgtheater, mi obra sobre una dinastía de actores que se mantienen muy activos durante el nazismo, que incluso participan en películas propagandísticas y que, una vez terminada la guerra, persisten y pueden seguir trabajando como si nada hubiera pasado.

–¿Cómo se siente ante la etiqueta de “escritora feminista”?
–Sí, soy una feminista. No creo que cualquier mujer capaz de pensar pueda ser otra cosa que una feminista. La lucha no es un mero combate contra la supremacía masculina y contra la negativa del hombre a dejar que la mujer participe de la vida pública, como debería ser, sino que es una lucha contra todo un sistema de valores patriarcal, al cual también yo estoy sometida, aun cuando de alguna manera haya podido “imponerme” y ganar premios. En la sociedad patriarcal es el hombre quien tiene el poder de juzgar, y la mujer debe doblegarse ante su juicio porque no ha podido instalar su propio sistema de valores. Sin embargo, el hombre también paga un precio, porque en la casa, en la esfera privada, muchas veces se debe sentir terriblemente subordinado. Y la causa de todo esto se remonta a la negativa de los patriarcas a compartir con la mujer el poder en la esfera pública, el poder hacia fuera, a eso me refiero.

Iggy Pop, una entrevista

En el Clarín publican una entrevista a la legendaria iguana. A su edad el tipo sigue rockeando y lo hace mejor que muchos. Si bien su producción es irregular, la crudeza de sus mejores obras, tanto con los Stooges como solista no fue valorada sino con el correr de los años, cuando otros artistas lo reconocieron como una influencia formidable. Un extracto:

Iggy es el sol personificado. Qué caballero es: amistoso hasta la exageración, siempre riéndose. En el escenario: sexo oral, heroína, peleas con los Hell’s Angels, rodadas sobre vidrio roto, su (impresionante) pene al aire, él arrojándose sobre la multitud, estrellándose en el piso, perdiéndose y arrastrando al público como ningún otro intérprete de rock. Fuera del escenario: lo mismo. Hoy, la voz estruendosa de Iggy Pop y sus cadencias al hablar me hacen pensar en uno de esos oradores empresariales motivadores. Sólo que, en vez de «¡Cree en ti mismo! ¡Todo está dentro de ti!», lo que dice es: «Con los primeros álbumes de The Stooges, todos decían ‘Eso podría haberlo escrito un mono. Mi hijo de cinco años podría tocar eso’. Y ahora los llaman clásicos y yo pienso: ‘¡Al carajo, váyanse al carajo!'»

Y un extracto de sus andanzas por Buenos Aires: En 1992, la Iguana llenó cuatro Obras entre el 14 y el 17 de agosto bajo la sombra radial de Brick by brick . Pero fue en 1993, y especialmente en sus shows en el desaparecido Prix D’ Ami de Belgrano, donde se definió su enamoramiento con Buenos Aires. El espacio exiguo del lugar permitió que su show se pareciera aún más a la performance de un orangután enjaulado, electroshock de por medio. O que fuera un strip tease para íntimos, donde esa piel untada sobre los huesos hinchaba unas venas que se marcaban cual fisuras de volcán. Una de aquellas noches de agosto de 1993 fue que conoció a su novia criolla, Alejandra Carrizo. Una muchacha por la que sufrió al punto de dedicarle uno de sus discos más tristones, Avenue B, en 1999, tras la separación definitiva. El hombre abría el disco recitando «En el invierno de mis 50 años me di cuenta de que estaba realmente solo». En la canción Miss Argentina, describe a Alejandra hablando de «un cuerpo rico en armonía/ una boca cruel como la muerte», antes de contar que a ella le gustan los Stones y los militares.

Poesía: José Watanabe

José Watanabe es uno de esos poetas tranquilos que publica cada cierto tiempo unos pequeños y entrañables poemarios, ajenos quizás a tendencias y usos dictados por la moda, pero fieles a su propio ideario, el de la palabra precisa. El día de hoy La República presenta un artículo redondeado con una pequeña entrevista y algunos de los nuevos poemas de su próximo libro. Más poemas aquí. A continuación un par de las preguntas de dicha entrevista y uno de los poemas.

–¿Crees en la inspiración?
–Yo sí creo en ese estado especial en el que uno hasta siente que recibe palabras, que te dictan, frases que vienen volando y se quedan ahí, solas. Pero eso es la primera versión, luego viene el proceso de corregir. Es lento, paciente, pero a mí me da más felicidad que escribir la primera versión.

–¿Es el turno del poeta?
–Exacto. Es allí donde te das cuenta de que estás jugando con un material tan maleable como es el lenguaje, tú tienes que forzar, fijarlo. Allí está la mano del poeta, pero no debe eliminar los impulsos y las cargas afectivas que llegaron con la inspiración.

La piedra alada

El pelícano, herido, se alejó del mar
y vino a morir
sobre esta breve piedra del desierto.
Buscó,
durante algunos días, una dignidad
para su postura final:
acabó como el puro movimiento congelado
de una danza.
Su carne todavía agónica
empezó a ser devorada por prolijas alimañas, y sus huesos
blancos y leves
resbalaron y se dispersaron en la arena.
Extrañamente
una de sus alas persistió indemne, sus gelatinosos tendones
se secaron
y se adhirieron
a la piedra
como si fuera un cuerpo.
Durante varios días
el viento marino
batió inútilmente el ala, batió sin entender
que podemos imaginar un ave, la más bella,
pero no hacerla volar.

Gustavo Cordera – Bersuit Vergarabat (Entrevista)

Mi contacto con el rock argentino actual es limitado, (por no decir nulo), pero el interés permanece, con Jorge Gobbi hace un tiempito conversábamos de la escena argentina en general, los grupos populares, los caleta y qué se entiende, o nos venden, por rock actualmente. Jorge manifestaba que bandas como Bersuit Vergarabat no eran de su agrado, a mí particularmente me caen un poco mejor que otras como La mosca o Decadentes, pero hasta ahí nomás (Aunque confieso que un último tema en vivo visto por la MTV me pareció bastante bueno). Bueno el asunto es que hoy Clarín presenta una entrevista a Gustavo Cordera, cabeza visible del grupo y responsable de la imagen y filosofía de la banda (o al menos así lo parece), y sinceramente me pareció una excelente entrevista, para muestra un par de segmentos de ella:

Fue vendedor de autos, okupa, cocainómano. Se creyó el Mesías, insultó a los políticos, llamó a la revolución. A los 43, está de vuelta de casi todo. El líder de Bersuit Vergarabat, la banda del año, habla del megaéxito, las drogas, la muerte y la argentinidad, su última obsesión. Sin pelos en la lengua.?

En los malos viejos tiempos, Cordera le vendió el alma a Belcebú. No quiere ahondar en esa época -su temporada en el pantano-, pero dice que todo es cierto. Que robó para pagarse los vicios; que no fue el mejor padre para Aylén, su hija mayor; que, sin tener dónde vivir, fue okupa de una casa en Dock Sud. Hoy, con departamento propio en San Telmo y dinero en el bolsillo, se ata al mástil de sus recuerdos para desoír el canto de sirenas del confort. «Aprendí que si usás la comodidad como un estilo de vida, te convertís en un ser aburrido, infeliz. El confort es una de las trampas más brutales que nos tiende Occidente. Fijate que las sillas te hacen adoptar una posición encorvada, antinatural. Son el atentado más grande a la salud.»

Raro escucharte hablar de salud, cuando cuidaste la tuya tan poco.
Sólo una persona que conoció todas las enfermedades puede hablar en serio de la salud. Yo veo a los curas hablar sobre los vicios ¿Los conocieron? ¿Fumaron porro, tomaron merca o ácido? No. Entonces, ¿cómo pueden hablar? Para mí, cuantas más experiencias tuviste, más cerca estás de la superación. Y el amigo más sincero que tenemos es la enfermedad. Fijate lo brutal que es, que si no dialogás con ella, te lleva a la muerte.

Pero vos cantás contra el poder y jamás lo tuviste. Sos como los que criticás: tocás de oído.
Te equivocás. Yo tengo un poder, y lo ejerzo. Mi poder es lograr que la gente sonría, baile y se excite. Tiene que ver con que la gente piense y dude de lo que le dicen los políticos. Nuestros shows son una fiesta, pero no una fiesta para evadirse.

Una fiesta que te deja algo triste…
Es que somos tristes. Pasa que este país está hecho por gente arrancada de su tierra; por indios que terminaron en las villas; por porteños que añoran a Europa. Y eso produce una melancolía enorme.

Cuando vendías autos, ¿dónde volcabas tus ideas, tu ideología?
En la vida. Un vendedor de autos puede ser una persona que se supera espiritualmente. Una puta puede convertirse en una santa, y te diría que es un recorrido lógico: nadie puede ser más leal que una puta. En la degradación, en la putrefacción, en lo más oscuro de tu vida es donde se plantan las semillas de una gran espiritualidad. Yo recorrí ese camino, y ese viaje nos benefició como banda. Hoy la Bersuit abarca todos los estratos sociales y todas las edades; por eso, porque no somos sectarios, nos va bien. En una época éramos más herméticos, y la gente que nos venía a ver también lo era.