No todos los fines de año se pasan igual, hay veces en los que uno no desea nada, la apatía domina y simplemente queremos que termine el bullicio y a empezar de nuevo, otras veces se lleva mucha ilusión desde antes de la fecha indicada y la carga de sentimientos es tal que no podemos sino quedar decepcionados. Sin embargo hay ocasiones en las que lo que secretamente se anhela se cumple y entonces la magia es infinita. Gracias Nicole. En este mundo de ilusiones la diosa Maya me hizo el regalo perfecto.